¿Quiénes son los Fifas y cómo identificarlos?

Podemos amar u odiar a las redes sociales, hasta es válido sentir una combinación de amor-odio por este universo digital. Lo cierto también, es que en las redes, sobre todo las usuarias y usuarios, se señala constantemente elementos que constituyen a la sociedad. Personajes, estereotipos y situaciones de las que antes no se hablaba. Hoy le toca a “los Fifas” una nota para ellos solos.

¿Los Fifas? ¿Como el juego?

Exactamente, justo de ahí surge el nombre, de la serie de videojuegos de fútbol. A pesar de que no existe un origen exacto de este término, es un apodo que se popularizó a inicios de este año.

Los Fifas son hombres heterosexuales, normalmente entre los 15 y 25 años, aficionados del futbol, que se caracterizan por la exposición constante de su misoginia en redes.

Los Fifas son hombres que llaman “feminazi” a cualquier mujer que exija respeto hacia ella y otras. Son aquellos que reprochan que “no son las formas” cuando ocurren marchas feministas, pero que cuando su equipo favorito de futbol gana, se reúnen en monumentos, los grafitean, se quitan la camisa, orinan en espacios públicos y causan destrozos. También son los que golpean paredes después de un arranque de ira y tienen cero responsabilidad afectiva o inteligencia emocional. Los fifas, son el hombre mexicano promedio.

Test rápido para saber si eres un Fifas

Responde a estas sencillas preguntas con sí o no:

  1. Cuando una “morra” utiliza una blusa con el nombre de una banda ¿le pides que te diga al menos 3 canciones, el tipo de sangre de todos los integrantes y su personalidades según Myers Briggs?
  2. Cuando durante las marchas feministas se pintan los monumentos, ¿crees que esas “no son las formas”?
  3. Cuando tu equipo favorito de futbol pierde, ¿reaccionas con violencia?
  4. ¿Disfrutas discutir a través de Facebook en publicaciones sobre feminismo y llamar a las mujeres “feminazis”, “luchonas” o “nenis”?
  5. ¿Cuando sabes que perdiste un debate, utilizas el “hazme un sandwich” como argumento?
  6. ¿Has golpeado una pared?
  7. ¿Te ofende que digan “Todos los hombres” a pesar de que tú no entres en la generalización que se hace del sector masculino?
  8. ¿Prefieres mantener amistades con hombres que han sido señalados como abusadores que solidarizarte con la(s) víctima(s)?
  9. ¿Te dan risa los videos de Paco de Miguel?
  10. ¿Usas Axe de chocolate?

Si respondiste que sí en una o más preguntas, ¡Felicidades! Eres un Fifas.

¡No es un meme!, es machismo

El referirnos hacia cierto porcentaje de la población masculina como “los Fifas”, no es un chiste, una burla o un meme, es señalar las acciones que cotidianamente los hombres realizan y que están envueltas en machismo.

Identificar el perfil de un hombre que se burla constantemente de las mujeres, es violento e irresponsable con sus acciones, es pura estrategia de supervivencia.

Hoy en día las niñas y las mujeres debemos estar alerta a todas horas, en todos los lugares y con todas las personas. Dotar de características al personaje del Fifas nos ayuda a reconocerlo y evitarlo sin salir heridas en el intento.

¿Ya no quieres ser un Fifas?, ¿qué puedes hacer?

Existen diversas acciones que tú y tus amigos pueden practicar:

  1. Guarda silencio y escucha: la mejor manera para dejar ir al Fifas que vive dentro de ti, es escuchando a las mujeres que te rodean. Interésate por sus vivencias, lo que tienen que decir. Escúchalas con atención y no repitas acciones que sabes que son violentas.
  2. Autoevaluación constante: después de oír lo que tu madre, tus hermanas, tus amigas y compañeras expresan, trata de recordar si has actuado de esa manera. Reconoce tus acciones y haz el intento consciente de no volverlo a repetir. Mantente atento.
  3. Incita a la conversación: entre tus amigos, anímalos a platicar sobre la violencia de género y cómo pueden dejar la complicidad atrás.
  4. Infórmate: Pregunta, investiga, haz tu chamba.
  5. ¡Rompe el pacto patriarcal!: Denuncia si viste o sabes algo, adviértele a otras mujeres si sabes que un sujeto es peligroso. Atrévete a incomodar a tus amigos, a tus familiares, señala cuando algo sea machista o violento.

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¿Qué es la sororidad? ¿Por qué es importante? ¡Te contamos!

Sororidad, una palabra que constantemente leemos en redes, que escuchamos en discursos y que entre mujeres necesitamos practicar diariamente pero, ¿qué es la sororidad? ¿A qué nos referimos cuando decimos “hay que ser sororas”?

Su origen

Existen tres momentos durante la historia que conformaron lo que hoy entendemos por sororidad.

El primero data desde 1921, cuando Miguel de Unamuno en su novela “Tía Tula”cuestiona la etimología de las palabras “fraterno” y manifiesta su confusión porque no existiera un término para describir a las hermanas, por lo que propone “sororidad”:

“No es lo mismo, ni mucho menos, lo paternal y lo maternal, ni la paternidad y la maternidad. (…) es extraño que junto a ‘fraternal’ y ‘fraternidad’, de frater, hermano, no tengamos ‘sororal’ y ‘sororidad’, de soror, hermana”.

Más tarde, durante los años 70, la escritora y activista feminista Kate Millet propone el término “sisterhood” (hermandad entre mujeres) para describir la relación de respeto, apoyo y solidaridad.

Finalmente en 1982, la antropóloga, filósofa y activista mexicana Marcela Lagarde, acuña el término “sororidad” después de traducir esta palabra del francés ‘sororité’ y en ingles, ‘sisterhood’.

¿En qué consiste?

En un texto de Lagarde titulado “La política feminista de la sororidad” (2009), Marcela realiza una reflexión sobre “La Carta de las Mujeres a la Humanidad”, hecha durante el año 2000 para denunciar la violencia que recorre las realidades de mujeres y niñas en el mundo. La carta hace un llamado a hacer cambios estructurales, cambios ideológicos y valorativos que mejoren nuestras sociedades y fomenten la igualdad, ­paz, libertad, solidaridad ­y justicia.

Durante este análisis, Marcela Lagarde también menciona que la “sororidad”:

“Tiene como sentido la alianza profunda y compleja entre las mujeres.

Tiene un principio de reciprocidad que potencia la diversidad. Implica compartir recursos, tareas, acciones, éxitos… (…)

La cosa no es ‘cómo nos queremos’; la clave está en que nos respetemos, algo difícil porque no estamos educadas en el respeto a las mujeres.

La sororidad exige de nosotras revisar la propia misoginia; cada una tiene que ir descubriendo dónde, cómo se nos aparece, cómo nos legitima para dañar a las otras. Eso también es violencia. La sororidad es una política que trata de desmontar la misoginia, acción básica para el empoderamiento de las mujeres y la construcción de la igualdad”.

La importancia de ser sororas

Como se menciona en “La política feminista de la sororidad”, ser sororas es un elemento fundamental en la construcción de sociedades más justas para mujeres y niñas. Para reestructurar el sistema patriarcal, es necesario que nosotras hagamos un análisis que se origine desde nuestro interior para descubrir de qué manera contribuimos a que ideologías y acciones machistas sigan rigiendo sobre nuestra autonomía, costumbres y actitudes.

Los ejercicios de autoconocimiento y reflexión deben hacerse todos los días, con cada acto que llevemos acabo. Es urgente replantearnos cómo interactuamos con las mujeres a nuestro alrededor, ya que necesitamos desprendernos de ideas que nos impiden unirnos y alcanzar el objetivo en común: vidas libres, dignas y seguras para todas.

Imágenes sobre sororidad

Aquí abajo te dejamos algunas imágenes y cuentas en Instagram que exponen a través de frases lo que significa la sororidad:


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