Las enfermedades de transmisión sexual (ETS), también conocidas como infecciones de transmisión sexual (ITS), son infecciones que se propagan principalmente a través del contacto sexual. Si sospechas que puedes estar infectado, es esencial actuar de manera oportuna para proteger tu salud y la de tus parejas.
Síntomas comunes de las ETS
Muchas ETS pueden ser asintomáticas, es decir, no presentan síntomas evidentes. Sin embargo, cuando los síntomas se manifiestan, pueden incluir:
- Secreción inusual del pene o la vagina.
- Llagas o verrugas en el área genital, oral o rectal.
- Dolor o ardor al orinar.
- Picazón y enrojecimiento en la zona genital.
- Dolor durante las relaciones sexuales.
- Inflamación de los ganglios linfáticos, especialmente en la ingle.
- Dolor en la parte inferior del abdomen.
- Fiebre.
Estos síntomas pueden variar según la infección específica y el género de la persona afectada.
Pasos a seguir si sospechas de una ETS
- Busca atención médica: Acude a un profesional de la salud para una evaluación y pruebas diagnósticas. La detección temprana es crucial para un tratamiento efectivo.
- Informa a tus parejas sexuales: Es fundamental que tus parejas actuales y anteriores sean notificadas para que también puedan hacerse las pruebas y recibir tratamiento si es necesario.
- Sigue el tratamiento al pie de la letra: Si se te diagnostica una ETS, cumple con el tratamiento prescrito. Algunas infecciones bacterianas se curan con antibióticos, mientras que las virales pueden manejarse con antivirales para controlar los síntomas y reducir el riesgo de transmisión.
- Evita las relaciones sexuales durante el tratamiento: Abstente de tener relaciones sexuales hasta que tanto tú como tu pareja hayan completado el tratamiento y hayan sido autorizados por un médico.
- Realiza seguimientos médicos: Algunas ETS requieren pruebas posteriores para asegurar que la infección haya sido eliminada o esté bajo control.
Prevención de las ETS
Para reducir el riesgo de contraer ETS:
- Usa preservativos: El uso correcto y constante de preservativos de látex reduce significativamente el riesgo de transmisión de ETS.
- Limita el número de parejas sexuales: Tener una relación monógama con una pareja no infectada disminuye las posibilidades de contraer una ETS.
- Vacúnate: Existen vacunas disponibles para prevenir infecciones como el virus del papiloma humano (VPH) y la hepatitis B.
- Realiza pruebas periódicas: Si eres sexualmente activo, especialmente con múltiples parejas, sométete a pruebas de detección de ETS regularmente.
La educación y la comunicación abierta con las parejas sexuales son esenciales para la prevención y el manejo adecuado de las ETS.
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